Un subdominio es un prefijo agregado al nombre de dominio de un sitio web que permite a las empresas organizar diferentes áreas de su sitio web o alojar diferentes servicios bajo el mismo dominio principal. Los subdominios funcionan como entidades separadas y se pueden utilizar para organizar contenido, dirigirse a audiencias específicas o alojar un servicio relacionado, como un blog o una tienda en línea, de manera separada del sitio web principal.
Por ejemplo, una empresa podría usar "shop.ejemplo.com" para su tienda en línea y "blog.ejemplo.com" para sus esfuerzos de marketing de contenidos. Esto ayuda a estructurar el sitio web de una manera que mejora la navegación del usuario y optimiza la optimización de motores de búsqueda al separar eficazmente diferentes tipos de contenido. Cada subdominio puede estar equipado con su propia interfaz de usuario, contenido personalizado y funciones de análisis separadas, que permiten una visión más detallada del rendimiento de las diferentes áreas del sitio web.
El uso de subdominios puede influir en la indexación de sitios web por parte de los motores de búsqueda y puede ser ventajoso para grandes organizaciones con diferentes requisitos de contenido o para alojar diferentes versiones de idiomas de un sitio web.